miércoles, 9 de enero de 2013

DÍA 1: Bienvenida




Ayer comenzó el rotatorio más esperado pero a la vez el más temido: Clínica Avanzada. 
Para la realización de este rotatorio elegí la UCI (Unidad de Cuidados Intensivos) en el Hospital de Alcorcón, ya que pienso que esta unidad me puede aportar muchos conocimientos y experiencias, y puede enriquecer mucho mi formación como enfermera.

El día comenzó con el recibimiento de los alumnos en el hall principal del hospital, y con la posterior redistribución en las unidades correspondientes. En mi caso mi destino era la UCI, situada en la planta baja del hospital.
Los sentimientos que estaban presentes en todo momento eran el de espectación y nerviosismo ante esta nueva unidad y el trabajo que se realizaba en ella, así como los pacientes que podría encontrar allí.
¿Y por qué espectación y nerviosismo?, porque se trata de una unidad en la que los pacientes que se encuentran ahí están graves y precisan de unos cuidados especiales, mucho más exhaustivos, una monitorización constante, medicación mucho más compleja que en otras unidades, en definitiva, se requieren muchos conocimientos para trabajar aquí y experiencia sanitaria, que considero que aún no tengo, pero que espero adquirir.

Una vez con el uniforme puesto, nos explicaron como se iba a desarrollar el rotatorio, que trabajos debíamos hacer, que seminarios tendremos a lo largo de estas siete semanas, etc. Y tras esta pequeña introducción al rotatorio, nos dirigimos a la unidad, en donde conocimos al personal sanitario y a las enfermeras que serán nuestras tutoras.

Y finalmente, tras todas las presentaciones pertinentes y de la visita por toda la unidad, ahí estaba yo, en medio de esa unidad tan distinta que nada tiene que ver con otras unidades que había conocido hasta ahora, llena de monitores que muestran las gráficas de las constantes de cada paciente, de sonidos de alarmas tan poco familiares para mí, de aparatos desconocidos, en resumen, era un ámbito totalmente nuevo que estoy dispuesta a llegar a conocer a lo largo de este rotatorio.

La aparatología no es el único cambio con respecto a otras unidades, ya que esta es de cuidados intensivos, por lo que los cuidados a los pacientes así deben ser, por tanto las enfermeras tienen asignados de 2 a 3 pacientes, dependiendo de la gravedad de estos, a diferencia de los 15 pacientes que puede llegar a tener una enfermera en otra planta de hospitalización. Esto se debe a que en la UCI se encuentran los pacientes en estado grave, que necesitan mayor medicación,  unos cuidados continuos y una vigilancia exhaustiva, por lo que se deben tomar y resgistrar las constantes cada hora, ya que debido al estado de estos pacientes, su estado de salud puede cambiar de una hora a otra, por lo que la monitorización y la vigilancia es fundamental, hecho que no se podría realizar si cada enfermera tuviera que ocuparse de muchos pacientes a la vez.
Esta unidad no está dividida por habitaciones, sino por boxes que son individuales, en donde los pacientes tienen todo el aparataje necesario para monitorizar su estado de salud, así como para  la administración de la medicación necesaria.

De mi primer día no puedo hablar de pacientes, de técnicas o de medicación, ya que ha sido un día de adaptación, de ubicarme en la nueva unidad y poder comprender los cuidados que se realizan en ella, así como de familiarizarme con el aparataje y su funcionamiento, pero pese a ello confío en que a lo largo de las siete semanas aprenda todo lo relacionado con esta unidad y del cuidado al paciente crítico.

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